Llamados a la Unidad |
Pero también hay de los que desean unirse, no importa la denominación, gente que pelea en las calles, héroes anónimos de batallas y heridas en sus hombros y manos, soldados de los cuales admiro mucho, gente que no tiene quizás un carnet de pastor, pero que hace mas que los mismos pastores que desean el cambio y la unidad, un PUEBLO EMPIEZA A UNIRSE, un llamado comienza a sonar desde el corazón de Dios que vendrá por una sola novia, un solo pueblo, queramos o no Dios vendrá por un pueblo unido un mismo corazón, un mismo sentir, una novia la única, no dos o tres, porque Dios no tiene amantes, Dios tiene su NOVIA; un pueblo de generaciones que siempre mantuvo los brazos extendido para unirse, un pueblo que no importa ceder su puesto con tal de lograr esa unidad de ser un solo pueblo, gente que esta dispuesto a regalar sus recursos con tal de hacer que la bandera de Dios flamee y se deje ver en este siglo, en esta ciudad, en esta tierra; es tiempo de recapacitar mirar al espejo saber si somos parte de la unidad, dejando atrás nuestros propios beneficios, sino buscando el beneficio de Cristo el de llevar paz, esperanza, cambios a nuestra cultura, transformándola a la cultura de adorar a Dios, ganando sus corazones para que haya temor de Dios en sus vidas; temor por no robar, temor para no violar, temor para no matar, temor para ser una mejor persona; entonces seras parte de su pueblo, parte de su gente, gente que no juzga sino que hace, gente que no desune sino une, gente que esta dispuesto a dejar el saco y la corbata y ponerse las sandalias del maestro, entonces solo entonces las noticias cambiaran, los periódicos tendrán algo mas para sus titulares y el corazón de Dios estará lista para llevar al altar a su ÚNICA Novia, a su único pueblo, alistemonos, capacitemonos, sirvamos, ayudemos, UNAMONOS¡¡¡